[Review 289]: París, luna roja – Blanca Álvarez

Él es un príncipe azul, guapo hasta decir basta. Ella, en cambio, no es gran cosa.

Sabe que tendrá que ingeniárselas para gustarle, para conseguir una segunda mirada suya… Pero que no sea guapa no significa que no sea capaz de envolverse de morbo y de misterio hasta volverlo loco a él, el ángel de cabellos negros y ojos esmeralda… ¡Ay, la atracción!

A ella le ha bastado una apuesta envenenada y el convencimiento de saberse una princesa que no se cruza de brazos hasta conseguir lo que quiere...

¿Quién ha dicho que los feos no pueden ser enormemente seductores?

Ficha técnica

Editorial: Grupo Planeta

Sello: Destino

Fecha Publicación: 04/2013

ISBN/ASIN: 9788408112518

Páginas: 220

Cubierta: Tapa blanda con solapas

Precio: 14.95 €

Ebook: 4.99 €

Primeras páginas: AQUÍ

Autora:

Blanca Álvarez es asturiana, licenciada en Filología Hispánica y diplomada en Trabajo Social. Autora muy prolífica, entre sus obras más conocidas están La verdadera historia de los cuentos tradicionales, El puente de los cerezos, La tetralogía Cuarteto de cuerda, Ópalo, El maleficio de la espina, Palabras de pan, El arquero de Porcelana, Tres besos y La soga del muerto.

Un extensísimo currículum que la ha hecho merecedora de muchos premios literarios como I Premio Internacional Cálamo de poesía erótica, el Premio de la Crítica de Asturias de  2004, el Premio Destino Infantil Apel-les Mestres, el Premio Ala Delta de literatura infantil y IX Premio Anaya.

Ha trabajado como periodista en el Grupo Prisa, en Interviú y actualmente en el Correo Vasco.

Opinión Personal

Tengo que reconocer que lo que más me llamó la atención de este libro era eso de que sería “erótica para adolescentes”. No entendía muy bien ese concepto (y sigo sin entenderlo…) porque la erótica es erótica y punto, según mi opinión. Puede ser más o menos explícita, más o menos cruda e impersonal, o más o menos romántica. Pero erótica.

Pues después de leer el libro, las dudas no se despejaron, pero me ha quedado claro que este libro tiene un toque muy personal. Es erótico, sí, pero con un erotismo insinuado y velado que consigue que imagines mucho más de lo que desvela, muy inteligente.

Dámaso supo, de inmediato y con el instinto de un animal en peligro, que aquella jovencita le cambiaría la vida. Y le extrañó aquel presentimiento porque a él sólo podría seducirlo y manipularlo alguien hermoso. Y la chica de la foto no lo era. No al menos según los cánones de Dámaso. Tan sólo extraña, como una mariposa en un acuario.

La historia me ha parecido muy muy original. Chica no demasiado agraciada sabe que sus armas no pueden ser la belleza sino la inteligencia, y consigue, mediante el uso del órgano más erótico del que disponemos (el cerebro…) conquistar al guapísimo protagonista que jamás se habría fijado en ella por su físico.

A través de secretos, misterios e insinuaciones levanta y aumenta el interés de Dámaso, hasta que este está ya tan envuelto en los juegos de Georgia, que lo que menos le interesa es cómo es ella físicamente. 

Cuando su dedo me tocó los labios, casi me muero allí mismo. Logré esquivarlo mientras todo mi cuerpo me gritaba que me acercara, que me lanzara sobre su cuerpo de dios pagano, que mordiera su boca carnosa hasta encontrar el sabor de la sangre.
¡Lograba activar los resortes más virulentos de mi personalidad!
¿Cómo se logra contener el primer deseo, el más ardiente, el que rompe los diques de la cordura?
Sería mío, pero sólo cuando yo sintiera que éramos dos esferas en el mismo universo.

Dámaso comienza siendo un personaje absolutamente superficial, su arrebatadora presencia física le ha abierto todas las puertas, nunca ha tenido que esforzarse por algo. Pero a su vida ha llegado el tedio y el aburrimiento, por lo que decide irse a París para buscar nuevas emociones y sensaciones, dar un rumbo nuevo a su vida, reencontrarse con su yo más profundo (si es capaz de tener uno…).

Georgia creció a la sombra de la maravillosa belleza de su madre sabiendo que ella no la había heredado. Sus vidas no han sido fáciles, pero su madre la aconseja que si no tiene belleza utilice otros dones que sí tiene, como su inteligencia. Y vaya si los utiliza bien.

Es un libro muy cortito, se lee en nada porque, al menos en mi caso, consigue despertar el interés sobre cómo Georgia va consiguiendo que Dámaso se olvide del exterior para que vea su interior. Es una lección de autoconfianza, una lección de que el erotismo puedes encontrarlo en cualquier parte si sabes buscar bien o insinuarlo. Y no os preocupéis, el libro es erótico, sí, pero nada explícito. Perfectamente pueden leerlo a partir de 16 años.

La erótica inteligente...

Muchas gracias a Destino por el ejemplar para la reseña.