Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato.
Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce sobre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.
Ficha técnica:
Datos: Editorial: Grupo Planeta Sello: Esencia Saga: Pídeme lo que quieras #1 Fecha Publicación: 11/2012 ISBN/ASIN: 9788408034513 Páginas: 464 Cubierta: Flexible sin solapas Precio: 14.90 € Epub: 7.99€ |
Autora:
Megan Maxwell es una reconocida y prolífica escritora del género romántico. De madre española y padre americano, ha publicado novelas como Te lo dije (2009), Deseo concedido (2010), Fue un beso tonto (2010), Te esperaré toda mi vida (2011), Niyomismalosé (2011), Las ranas también se enamoran (2011), ¿Y a ti qué te importa? (2012) y Olvidé olvidarte (2012) además de cuentos y relatos en antologías colectivas. En 2010 fue ganadora del Premio Internacional Seseña de Novela Romántica, y en 2010 y 2011 recibió el Premio Dama de Clubromantica.com.
Megan Maxwell vive en un precioso pueblecito de Madrid, en compañía de su marido, sus hijos, su perro Drako y su gato Romeo.
Encontrarás más información sobre la autora y su obra en www.megan-maxwell.com
Opinión Personal
Me encanta cuando lees un libro pensando en no encontrarte nada nuevo y de repente te ves sumergida en sus páginas tanto que no puede parar de leer hasta la última página. Hay que reconocer que las expectativas a veces dan muchos problemas, pero cuando son bajas y te equivocas ¡wow! Pues eso me ha pasado a mi con Megan Maxwell.
No he leído nada anterior de ella, y es que esa tendencia chic-lit que tienen sus novelas me tira mucho para atrás. No me gusta el chic-lit, todas las protagonistas (hasta ahora) me parecen una resabiadas y no consigo conectar ni con ellas ni con sus historias. Así que podéis imaginaros que Megan era para mi alguien que no me decía mucho literariamente hablando. Pero al ver que escribía una novela erótica me planteé en seguida leerla para descubrir esa frescura de la que todas las reseñas hablaban cuando se trataba de sus libros. Y he de reconocer que esta chica sabe lo que se hace…
La historia de Judith y Eric te conquista línea a línea. Y mira que precisamente los gustos sexuales de Eric son los que, personalmente, me dan más repelús y a los que yo me opondría con todas mis fuerzas. Pues aun así, la historia convence y atrapa.
—¿Cenas conmigo?Vuelvo a mover la cabeza, pero esta vez para negarme. No pienso cenar con él. Es el jefazo, el dueño de la empresa. Pero mi respuesta parece no agradarle y afirma:—Sí. Cenas conmigo.—No.—¿Te gusta llevarme la contraria?—No, señor.—¿Entonces?—Yo no ceno con jefes.—Conmigo sí.
Judith es divertida y extrovertida. Vive día a día sin plantearse demasiado en serio su vida. Trabaja en una gran compañía farmaceútica alemana como secretaria sobreexplotada por su jefa pero le gusta su trabajo. Y, por supuesto, todo su mundo cambiará cuando conozca a Eric Zimmerman, el jefe y dueño de la empresa después de la muerte de su padre.
El encuentro de ambos protagonistas por primera vez en ese ascensor es fantástico. Por un momento me estaba temiendo algún tipo de caída estrepitosa de nuestra protagonista a los pies de él… pero no fue así y en ese punto me empezó a “ganar” la autora. Porque a pesar de las similitudes que se pueden encontrar entre esta y la reciente oleada de novelas eróticas, (que por otro lado creo que son inevitables…) esta en concreto, tiene unos atisbos de originalidad que te convencen por completo. Y aun sigo pensando en ese chicle…
Con los típicos y esperados altibajos en la relación que establecen los protagonistas y que todo el mundo espera en este tipo de libros, se nos va desarrollando la historia de Eric y Judith. Por supuesto nuestro chico tiene un pasado que oculta y que le ha marcado. Y que Judith se empeña en descubrir hasta sus últimas consecuencias. Y luego están las preferencias en materia de cama del señor Zimmerman… Como ya dije antes creo que jamás podría hacer nada semejante en mi vida privada, personalmente creo que se aleja bastante de mi personalidad, por eso me ha sorprendido que, aun así, la novela consiguiera engancharme y gustarme como me gustó. Supongo que la culpa es completamente de la autora…
Su gesto se relaja, baja hacia mi boca e intenta besarme. Yo retiro la cara.—¿Me acaba de hacer la cobra, señorita Flores?—Sí.—¿Por qué?—Sencillamente porque no quiero besarte.Divertido curva sus labios.—¿En este momento para ti soy un gilipollas?—Pues sí. En toda su extensión, señor Zimmerman.
Acompañan a los protagonistas unos cuantos personajes más, entre los que destacaría a la histriónica hermana de Judith, al encanto de su padre, Miguel su compañero de trabajo (este chico se me quedó un poco desaprovechado ¿no? :P) y Fernando, el eterno pretendiente que me llegó hasta a caer un pelín gordo y todo, pero que en el fondo es un cachito de pan. Entre todos ellos volverán locos a los protagonistas y los acompañarán en sus desventuras mientras nosotros unas veces reímos y otras… reímos menos… (jo cómo lloré con lo de Curro…)
Y llegamos quizá la única cosa que encuentro negativa en el libro, el excesivo uso de ciertos localismos en el lenguaje, que me imagino que la autora utiliza como recurso para enfatizar la frescura y naturalidad de la protagonista, pero que no todo el mundo llegará a entender. A mi me ha pasado con algunos. Y es que creo que a veces ser demasiado natural tampoco es bueno, hay un punto de no retorno…
Y de repente… el final. Un final que cierra un arco argumental que veíamos venir pero que no por ello te deja menos desesperada por saber qué va a pasar ahora con estos dos… A pesar de que aplaudo la actitud de Judith y la comparto totalmente, no por ello sufrí menos con ese final. Y, por supuesto, te quedas totalmente desesperada por continuar sabiendo de estos dos.
Para finalizar, recomiendo totalmente este libro, y es posible que me arriesgue a leer algo de la novela histórica que tiene la autora por que con este libro convence con autoridad. La he puesto en el altar erótico justo al ladito de Noelia Amarillo y Bela Marbel, ¡ahora ya tengo una trinidad! De todas formas, y como nacida en Alemania, creo que tengo derecho a reclamar un ejemplar así para mi colección ¿no?
Y luego dicen que los alemanes son fríos... |
Saga Pídeme lo que quieras:
- Pídeme lo que quieras (Noviembre 2012)
- Pídeme lo que quieras ahora y siempre (en 2013, espero que pronto)
Muchas gracias a Esencia por el envío del epub para la reseña.