[Review 32]: Senderos - Mar Carrión

Título Original: Senderos
Editorial: Roca Editorial
Colección: Terciopelo
Fecha Publicación: 07/2011
ISBN: 978-84- 92617920
Páginas: 320
Cubierta: Rústica
Precio: 17.50 €


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Sinopsis:

La vida de Erin Mathews no es nada fácil. Tiene un padre tirano y egocéntrico que jamás les demostró ni a ella ni a su hermana una pizca de cariño y un trabajo que si bien no odia tampoco es que sea el trabajo con el que siempre ha soñado. Su única afición es la única vía de escape.

El piloto Jesse James Gardner lo ha perdido todo, incluida la licencia que es medio de subsistencia. El responsable, Wayne Mathews, el padre de Erin. Por ello, cuando esta se presenta en la puerta de su casa ofreciéndole dinero por ayudarla en un absurdo, no puede sino aprovechar la ocasión de indagar cuánto sabe ella de la razón de su despido, de su juicio (pendiente de apelación) y de la pérdida de su licencia.Desde luego lo que ninguno de los dos espera es que sus senderos, que creían paralelos, hayan girado noventa grados y se hayan cruzado. ¿Qué es lo que está surgiendo entre ellos aparte de la admiración por la integridad del otro? Juntos descubrirán que la vida, a veces, te muestra senderos que jamás pensaste que recorrerías.

Autora:

Mar natural de Albacete, nació en 1974. Pese a que cursó la carrera de derecho, y trabaja como contable, su verdadera vocación era el periodismo. Ha escrito desde los trece años, y la escritura junto con la lectura, la música y el cine son sus aficiones. No fue hasta hace un par de años que empezó a tomarse con más seriedad la escritura y este año se decidió a enviar su novela al Premio. Reciente ganadora del Premio Relato Corto de Harlequín con su relato Mary cambia su destino.

Opinión personal

Y aquí estoy otra vez con un primer acercamiento a una autora española y en contemporánea… debe ser una racha… Sé que todo el mundo habla maravillas de Bajo el cielo de Montana, pero como a mi la contemporánea no me gusta(ba) demasiado… Así que Senderos se merecía toda mi atención, y se la ha merecido y mucho.

Senderos es una novela sencilla, sin grandes pretensiones y por ello resulta encantadora, una historia de amores encontrados sin querer e insistiendo mucho en el sin querer, porque los protagonistas tratan de evitar su enamoramiento a toda costa.

Gardner se hallaba en la barra, y Erin lo reconoció por el contorno de sus anchas espaldas y por el corte irregular de sus cabellos que descendían hacia su nuca. Como si él la hubiera presentido, se dio la vuelta en el instante en que Erin cruzaba los escasos metros que todavía la separaban de él. Llevaba una chaqueta de cuero negro que le hacía parecer un poco más rebelde de lo que ya era, y sus ojos azules la miraron como complacido por la inmediata respuesta de Erin a su llamada. La saludó con un gesto pero no dijo nada, y a ella no le quedó más remedio que esperar a que él terminara la conversación que mantenía con una rubia y despampanante camarera que estaba situada al otro lado de la barra. Erin se cruzó de brazos y trató de comprender de qué iba todo aquello, mientras observaba cómo la chica cogía la mano de Gardner para apuntar algo en el dorso con un bolígrafo de color negro.

Erin me pareció un personaje un poco triste, eso de ocultar su verdadero yo a todo el mundo excepto a su hermana… Pero según avanzas en la novela te enamoras de ella por su dulzura, por su inocencia y porque es un encanto…

Y Jesse (anda que ponerle Jesse James… como el pistolero… jajajaja) te cae bien desde el principio, porque ya sabemos que cualquier personaje atormentado nos va a encantar ¿no? Y este lo está totalmente, por perder su empleo, por su desengaño amoroso, por la traición en su vida… Así que según le “ves” lo adoptas.

—Estás guapa cuando te enfadas.
—Tú no me has visto enfadada.
—Pues estás guapa de todas formas. El corazón de Erin dio un curioso salto contra su pecho y sintió un cosquilleo en la piel que le erizó el vello. La mente se le quedó en blanco mientras observaba a Jesse incorporarse lentamente sobre la arena. Los bíceps en tensión, la brisa marina agitando los mechones más largos de su cabello y acoplando su camisa de algodón a cada músculo fibroso... Luego apoyó su peso en un brazo, de forma que se acercó mucho más a ella. Erin podía olerlo y sentir su calor. Sintió que las palmas de las manos se le cubrían de sudor, y se le olvidó por completo cuál era el tema del que habían estado hablando.

El viaje, y tanta descripción terminaron haciéndoseme un poco largas, no por que fueran pesadas, si no porque yo quería llegar al “asunto” y el “asunto” tarda muuuuucho en llegar. Sé que es mi impaciencia, pero… ¿no podían haberse besado al menos? XD Sin embargo la estancia en Beaufort me encantó. ¿De verdad hay pueblos así en Estado Unidos? La familia de él es genial, y toda su estancia en general. Realmente sufrí mucho cuando se fueron, pero mucho, mucho, mucho.

Y espero que en algún momento Mar Carrión nos escriba las novelas de Maddie y de Alice… porque a mi por lo menos me ha dejado con muchas ganas de ver que terminan siendo muy felices…

—¿Sabes dónde te metes, Erin? Si te quedas a mi lado has de saber que nunca, jamás, te voy a dejar marchar.
Erin lo miró con embelesamiento y aferró los brazos alrededor de su cintura con más fuerza. —Estaré contigo hagas lo que hagas y vayas donde vayas. El cosquilleo que recorría la piel de Jesse se intensificó al escuchar esas palabras de amor incondicional. —Te quiero, Erin. Estoy tan enamorado de ti que hasta me asusta la dimensión de lo que siento. —Tomó su cabeza con las manos y sondeó la oscura profundidad de sus ojos—. He amado antes pero no de esta forma tan desesperada. No sé qué habría hecho si te hubieras apartado de mi camino.

Conclusión: una novela dulce y con mucho amor que no solo se deja leer sino que se disfruta, a pesar de que nos haga sufrir mucho porque retrasa mucho el encuentro amoroso entre los protagonistas. El trasfondo de la historia de Mary Truscott es preciosa y le da un puntito sobrenatural a la novela que me gustó mucho y además añade el paralelismo con el final de la novela que me pareció un recurso precioso.