[Review 53]: Antes de despertar - Kathryn Smith

Título Original: Before I wake

Editorial: Planeta

Colección: Esencia

Fecha Publicación: 10/2011

ISBN: 9788408103684

Serie: Pesadillas en Nueva York #1

Páginas: 383

Cubierta: Rústica sin solapas

Precio: 16.00€

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«Podría decirse que mi trabajo es un sueño, y en cierto modo así es. De hecho, me pagan para que estudie los sueños de la gente, algo que me resulta mucho más fácil de lo que podría parecer... Al fin y al cabo soy Dawn, la hija mortal de Morfeo, rey del mundo onírico, y puedo meterme en la mente de quien duerme, e incluso derrotar a sus demonios. Pero más que un sueño, mi trabajo es una auténtica pesadilla, pues no me iría nada mal poder dormir una noche de un tirón…

»Sin embargo, desde que conocí a Noah Clarke me siento atrapada entre dos mundos. Noah es inteligente, sexy y capaz de controlar sus propios sueños. Podría ser el hombre perfecto para mí de no ser porque, cuando se queda dormido, lo acecha un malvado demonio empeñado en destruirlo no sólo a él sino también al planeta entero.»

La autora:

Kathryn Smith empezó a escribir prácticamente cuando todavía era una niña, y desde entonces se ha dedicado en cuerpo y alma a inventar nuevas historias. Descubrió las novelas románticas cuando estudiaba periodismo, y decidió que quería llegar a escribir como Lisa Kleypas.

Kathryn Smith es una autora relativamente nueva en el mercado anglosajón –publicó su primera novela, Elusive Passion, en el 2001–, a pesar de ello tiene una extensa bibliografía (en la que abarca el género histórico y, recientemente, el paranormal) y sus novelas han ganado alguno de los premios más prestigiosos del género (varios de sus héroes han recibido el K.I.S.S.)

Opinión personal

Algo diferente en romántica paranormal, y no es decir poco. Kathryn Smith nos introduce con esta nueva saga (aunque de momento ni saga, porque sólo hay dos) en el mundo de los sueños y en la mitología de los mismos, haciendo que su protagonista sea nada más y nada menos que la hija de Morfeo (no, el de Matrix no, el de la mitología griega que era el dios de los sueños…).

Así que si unimos una psicóloga especializada en sueños que puede introducirse en los mismos, añadimos unos pocos problemas familiares (sobre todo maternos), un chico malo malísimo, un chico de rechupete y un mundo de los sueños de lo más interesante, obtendrás una fantástica materia para una nueva saga.

Hace ya bastante tiempo que leí la saga de vampiros de esta autora, que también me gustó mucho, y la verdad es que no recordaba lo bien que escribe Kathryn Smith, es natural, informal, de lo más fluido. Disfrutas cada línea. Es casi como una conversación.

La protagonista, Dawn, a pesar de ser una guerrera de los sueños e hija de un dios, resulta de lo más cercana. Con sus dudas sobre todas las cosas que dudamos las humanas del montón. Y a pesar de la mala relación que tiene con sus padres, tampoco es un personaje torturado, que sufre en cada línea… Resulta muy agradable. Ahora que se tiene que enfrentar a un enemigo en sus sueños es cuando se da cuenta del error que cometió al abandonar ese mundo en la adolescencia. Tiene que aprender de nuevo todo lo que pueda para defenderse y defender a Noah.

—¿De verdad te llamas Dawn?
—A mi madre le gustaba —afirmé.
Se rió, las comisuras de los ojos se arrugaron como las tablas de una falda. Tenía los dientes grandes y blancos como la nieve. Cuarenta años atrás, seguro que se parecía a Denzel, pero ahora recordaba más a Morgan Freeman.
—¿Tu padre es Morfeo?
—Eso me han dicho.
Bebió un poco de agua de una botella que hasta entonces yo no había visto.
—Tienes sus ojos.
¿Cómo diablos conocía aquel viejo a Morfeo?
—¿Es amigo suyo?
Antwoine negó con la cabeza y una leve expresión de tristeza se reflejó en su rostro.
—Nuestros caminos se cruzaron hará unos treinta años.

Noah es el chico estupendo, guapo y dañado, pero silencioso, con un toque maravilloso de oscuridad que espero descubramos en el siguiente libro. A pesar de que nos hace sufrir a nuestra Dawn, es que el pobrecillo no lo puede evitar, necesita no sentirse víctima, defenderse por sí mismo. Y esto en el mundo de los sueños, no lo puede hacer sin que Dawn le ayude. No es el típico héroe torturado que se vuelve casi un sociópata, él lidia con sus fantasmas a solas y de cara al resto del mundo es un encanto. Excepto para Dawn, que sabe mirar donde nadie más puede, en sus sueños.

Ese día iba mal afeitado. No era muy peludo, lo que resaltaba sus músculos, perfectamente visibles bajo su piel dorada. Tenía los ojos negros, o casi negros. Su complexión hablaba de antepasados caucásicos, pero el pelo y los ojos oscuros, y la curva de la nariz dejaban entrever algo más exótico.
Noah era exótico, incluso con aquella torpe sonrisa que siempre me regalaba. Fue la sonrisa lo que me mató, lo que me hizo preguntarme si podría haber algo más entre él y yo que una relación médico-paciente. No tenía derecho a hacerme esas preguntas, pero ¿cómo podía evitarlo cuando lo veía con aquel pantalón de pijama en plan tan sexy?

Todo el mundo que la autora crea sobre los sueños, su mitología, sus protagonistas, me ha parecido precioso y muy original. Porque yo al menos sí conocía a Morfeo, pero no tenía ni idea de sus hermanos, y el papel que juegan en los sueños de las personas. Y lo de las Pesadillas cuidando nuestros sueños también es muy bonito y original. Realmente un acierto.

En honor a mi querida Kelly Dreams, he de reconocer que sí, la autora introduce un montón de marcas comerciales, casi todas “low cost” todo hay que decirlo, para contarnos el maquillaje que se pone, el pintalabios que usa… Es cierto que sobra, no es necesario saber el color exacto de su laca de uñas para entender la historia… Pero hasta que Kelly no me lo señaló, yo ni me había fijado, de lo “pegada” que estuve a la narración.

—Ten cuidado —me advirtió.
—Lo tendré —respondí.
—Si te hace daño... —El resto de la frase quedó suspendido entre los dos mientras nuestras miradas se encontraban. No podía ni imaginar lo que Noah estaba pensando, pero me reconfortó de todos modos. Los hombres no dicen esas cosas si no sienten algo por ti. Si no te aman.
No sé cuál de los dos se inclinó primero, quién fue el primero en ceder, pero en cuestión de segundos estuvimos besándonos como si nos fuera la vida en ello. Y quizá era así.
Él dejó la copa de vino encima de la mesa y luego se agachó para cogerme en brazos. ¡Aquel hombre tan atractivo me había cogido en brazos!
—Noah, no, peso demasiado...
—Cállate —me riñó—. Eres perfecta.
Oh, sí. Corría el peligro de enamorarme de él.

La verdad es que el libro me enganchó desde la primera página, la lectura es tan agradable que cuando te quieres dar cuenta se te ha terminado, y estás deseando que este mes salga el siguiente para ver cómo sigue la saga. Lo malo es que el tercero, porque creo que estaba programado como trilogía, aun no está escrito (al menos en la web de la autora no se habla de él) así que nos va a tocar esperar…

Muy bueno. Debes leerlo!